NACIONES 
UNIDAS
HS

Comisión de 
Asentamientos Humanos
Distr. 
GENERAL 

HS/C/17/6 
1o de diciembre de 1998 
 

ESPAÑOL  
ORIGINAL: INGLÉS



 17o período de sesiones
Nairobi, 5 a 14 de mayo de 1999
Tema 7 b) del programa provisional*

 

 

COOPERACIÓN INTERNACIONAL PARA LA APLICACIÓN DEL PROGRAMA DE HÁBITAT
Informe del Director Ejecutivo
Resumen

 

Este informe se presenta de conformidad con la decisión 16/31 de la Comisión, en que la Comisión decidió incluir en su programa del 171 período de sesiones el tema "Cooperación internacional para la aplicación del Programa de Hábitat".

 
Para la preparación de este informe, el CNUAH (Hábitat) pidió a todos los países y a una lista seleccionada de organizaciones multilaterales, asociaciones internacionales de autoridades locales y organizaciones no gubernamentales internacionales que presentaran información actualizada sobre el tema, basándose en un cuestionario. Esta contribución puede considerarse un primer paso en el proceso que llevará a cabo la Asamblea General en el año 2001 para un examen y evaluación generales de la aplicación de los resultados de la Conferencia Hábitat II.

 
En la introducción del presente informe se reseñan los elementos principales del Programa de Hábitat relativos a la cooperación internacional, en especial las secciones correspondientes a la "Cooperación y coordinación internacionales" y "Ejecución y medidas complementarias del Programa de Hábitat". La primera parte del informe se centra en la cooperación internacional para ejecutar el Programa de Hábitat en los niveles


* HS/C/16/1.

 

nacional y local mediante el fortalecimiento o elaboración de planes de acción. En la parte II, la atención se centra en la cooperación internacional para la vigilancia de la ejecución del Programa de Hábitat. En la parte III se examina la cooperación internacional para el fortalecimiento de la participación de grupos asociados en la ejecución del Programa, incluidas las autoridades locales, parlamentarios, organizaciones no gubernamentales y de base comunitaria y el sector privado. La parte IV está dedicada a las actividades que realizan el sistema de las Naciones Unidas y otros organismos de desarrollo para apoyar la ejecución del Programa de Hábitat. En la parte final del presente informe figura una serie de cuestiones que serán objeto de examen.

 
Se invita a la Comisión a celebrar debates sobre las medidas que se adoptarán en un futuro a nivel internacional, así como sobre las que tomará la comunidad internacional. Esas medidas deberían promover la ejecución del Programa de Hábitat en los niveles nacional y local por medio de la cooperación internacional.

 

ÍNDICE
INTRODUCCIÓN
 
I. COOPERACIÓN INTERNACIONAL PARA LA EJECUCIÓN DEL PROGRAMA DE HÁBITAT EN LOS NIVELES NACIONAL Y LOCAL
 
II. COOPERACIÓN INTERNACIONAL PARA LA VIGILANCIA DE LOS ADELANTOS REALIZADOS EN LA EJECUCIÓN DEL PROGRAMA DE HÁBITAT
 
III. COOPERACIÓN INTERNACIONAL PARA EL FORTALECIMIENTO DE LA PARTICIPACIÓN DE LOS INTERESADOS DIRECTOS CLAVE EN LA EJECUCIÓN DEL PROGRAMA DE HÁBITAT
 
IV. ACTIVIDADES REALIZADAS POR EL SISTEMA DE LAS NACIONES UNIDAS Y OTRAS ORGANIZACIONES DE DESARROLLO

V. PUNTOS QUE SE SOMETERÁN A EXAMEN

 

 
 INTRODUCCIÓN

 

1. Este informe se presenta de conformidad con la decisión 16/31 de la Comisión, en que la Comisión decidió incluir en el programa de su 171 período de sesiones el tema "Cooperación internacional para la ejecución del Programa de Hábitat". Para la preparación de este informe, Hábitat pidió a todos los países y a varias organizaciones multilaterales, asociaciones internacionales de autoridades locales y organizaciones no gubernamentales que presentaran información actualizada sobre el tema, basándose en un cuestionario. Esta contribución se puede considerar un primer paso en el proceso que llevará a cabo la Asamblea General en el año 2001 para un examen y evaluación generales de la aplicación de los resultados de la Conferencia Hábitat II.

 
2. La responsabilidad del logro de los objetivos del Programa de Hábitat recae principalmente en cada país, en todos los niveles, pero en los países en desarrollo que están pasando por una situación de deterioro continuo la disminución general de la asistencia para el desarrollo es motivo de gran preocupación (párrafo 195 del Programa de Hábitat). En Estambul se invitó a todos los organismos de desarrollo multilaterales y bilaterales a establecer y/o fortalecer los mecanismos destinados a integrar a sus políticas los compromisos contraídos y las medidas relativas a una vivienda adecuada para todos y al desarrollo de asentamientos humanos sostenibles (inciso a) del párrafo 211).
 

3. Las recientes tendencias de globalización plantean un problema para los procesos y las estructuras de cooperación internacional existentes y ponen de relieve la necesidad de encontrar formas nuevas e innovadoras de cooperación (párrafo 197). Para ello será necesario fortalecer las modalidades complementarias de cooperación descentralizada a fin de mejorar las organizaciones de la sociedad civil y sus relaciones con las autoridades locales y de éstas entre sí, así como aumentar su participación en la cooperación internacional (párrafo 198). El Programa de Hábitat invita a las instituciones internacionales de desarrollo a apoyar a los países en los esfuerzos que realizan para crear estrategias y marcos habilitantes que permitan a todos los interesados directos establecer relaciones de colaboración (inciso f) del párrafo 204), y crear y fortalecer relaciones de colaboración directas con las asociaciones internacionales de autoridades locales, organizaciones no gubernamentales y organizaciones de base comunitaria.

 
4. Se deberían crear mecanismos e instrumentos para fomentar la capacidad de las autoridades locales y de los sectores privado y de la comunidad para acceder a los mercados financieros (inciso d) del párrafo 202). En el programa también se reiteró una recomendación en virtud de la cual los asociados de los países desarrollados y países en desarrollo deberían asignar un 20% de la asistencia oficial para el desarrollo y un 20% de su presupuesto nacional, respectivamente, a los programas sociales básicos (inciso y) y dd) del párrafo 204).

 
5. Las organizaciones internacionales pueden cumplir un importante papel en la difusión de la información sobre tecnologías, conocimientos y experiencias relativas a los marcos institucionales, jurídicos y reglamentarios, así como en facilitar el acceso a esa información, y también en la difusión de las mejores prácticas (párrafos 205 e inciso c) 206).

 

 I. COOPERACIÓN INTERNACIONAL PARA LA EJECUCIÓN DEL PROGRAMA DE HÁBITAT EN LOS NIVELES NACIONAL Y LOCAL

 

6. La guía principal para ejecutar el Programa de Hábitat son los planes de acción nacionales preparados por los 127 países para la Conferencia Hábitat II. La mayoría de estos planes de acción quinquenales se elaboraron utilizando procesos consultivos de amplia base, en los que participaron diversos interesados directos. En el Programa de Hábitat se insta a movilizar el apoyo de los donantes para la ejecución de los planes de acción nacionales y locales de los países en desarrollo, especialmente en los países de África y países menos adelantados. Si bien el proceso de vigilancia del Programa de Hábitat todavía se encuentra en sus inicios, ya se puede vislumbrar el compromiso y la asistencia de la comunidad internacional para apoyar la ejecución del Programa en los niveles nacional y local.

 
7. A pesar de que no hay fondos suficientes para emprender misiones específicas y adoptar medidas concretas para apoyar la ejecución del Programa de Hábitat en los niveles nacional y local, la mayor parte de las misiones de Hábitat relacionadas con la cooperación internacional en los países en desarrollo incluyen exámenes de los adelantos realizados en la ejecución de los planes de acción nacionales. En ese sentido, Hábitat ha publicado directrices para el sistema de coordinadores residentes de las Naciones Unidas para la aplicación del Programa de Hábitat. En la actualidad, todos los programas y proyectos de Hábitat se están diseñando conforme a los objetivos y principios del Programa de Hábitat.

 
8. Teniendo en cuenta la Iniciativa especial para África del sistema de las Naciones Unidas, Hábitat preparó el Programa especial de Hábitat para África, que ha sido objeto de amplios debates con los gobiernos y otros asociados africanos. La mayor parte de los organismos de desarrollo todavía no han podido prestar apoyo financiero al Programa especial. Hábitat y el PNUMA también iniciaron una iniciativa conjunta titulada "Ordenación del agua para las ciudades africanas", como medida complementaria de la Declaración de Ciudad del Cabo, adoptada en 1997 por los ministros africanos responsables de las cuestiones relacionadas con el agua.

 
9. En América Latina, Colombia presenta informes de las actividades de cooperación internacional con distintas organizaciones, incluido Hábitat. En Asia, la India está trabajando en estrecha colaboración con Hábitat y otros asociados para ejecutar el Programa de Hábitat, en especial empleando nuevas formas de cooperación en las que participan distintos actores. La India espera poder seguir realizando este tipo de actividades de cooperación y también propone diversas actividades de asesoramiento para los países en desarrollo, incluidas actividades de capacitación. En Filipinas se han establecido mecanismos de ejecución para el Plan nacional de acción y ese país está procurando obtener el apoyo de la comunidad internacional en esferas prioritarias clave, en las que es necesario fortalecer el papel de vigilancia de Hábitat en la ejecución del Programa de Hábitat. En África, Benin y la República Unida de Tanzanía informan de diversas actividades en la esfera de la cooperación internacional y esperan poder obtener apoyo adicional. Sudáfrica está estableciendo un formato para la presentación de informes internacionales sobre la ejecución del Programa de Hábitat.
 

10. A pesar de los compromisos contraídos en Estambul y de las actividades promisorias emprendidas, la comunidad internacional sigue mostrando poco interés en apoyar la ejecución del Programa de Hábitat en los niveles nacional y local en los países en desarrollo. Una de las razones de esa falta de interés podría ser la imposibilidad de muchos de los países en desarrollo de presentar planes de acción actualizados y compromisos y estrategias coordinados. También se puede citar la falta de arreglos institucionales activos y eficientes a nivel nacional para vigilar la ejecución y los adelantos logrados. Pocos países han mantenido mecanismos de esa índole desde la Conferencia Hábitat II, a pesar del llamamiento hecho por la Asamblea General en su resolución 51/177, de 16 de diciembre de 1996, que fue trasmitida por Hábitat a todos los gobiernos. De todos los países en desarrollo, Ghana, Guinea, Kenya, Mali, Senegal, Sudáfrica y Uganda en África, el Brasil, Colombia, Cuba, Chile y Perú en América Latina y Filipinas, la India, Indonesia y la República Islámica del Irán en Asia han informado de la existencia de acuerdos institucionales de ese tipo.

 

 II. COOPERACIÓN INTERNACIONAL PARA LA VIGILANCIA DE LOS ADELANTOS
REALIZADOS EN LA EJECUCIÓN DEL PROGRAMA DE HÁBITAT

 

11. Siguiendo instrucciones de la Comisión de Asentamientos Humanos, Hábitat estableció un Observatorio Urbano Mundial encargado de la coordinación de la vigilancia y evaluación mundiales de los adelantos realizados en la ejecución del Programa de Hábitat. El Observatorio Urbano Mundial une el Programa de indicadores urbanos y la Iniciativa de mejores prácticas y está dedicado a hacer participar a todos los asociados en la promoción del establecimiento de políticas y estrategias más efectivas a través de procesos de adopción de decisiones más fundamentadas. También se prepararon guías sobre las mejoras prácticas e indicadores urbanos, así como un documento de reseña sobre la "Vigilancia de los adelantos realizados en la ejecución del Programa de Hábitat". Asimismo, existe un informe sobre el Estado de las Ciudades del Mundo y la Comisión de Asentamientos Humanos tendrá ante sí un resumen de ese informe.

 

12. Según un estudio realizado por la Comisión Económica para Europa (CEPE) sobre las medidas complementarias de la Conferencia Hábitat II, una de las prioridades identificadas por los países con economías en transición es la integración regional a través de un intercambio sistemático de experiencias. A pesar de ello, y de que se ha reconocido ampliamente la utilidad de los ejemplos de casos positivos con datos y antecedentes pertinentes, la mayoría de los países miembros en general no estudian ni documentan en forma sistemática las mejoras prácticas. España ha apoyado la traducción al español de la Base de Datos Internacional sobre Mejores Prácticas. Entre las reuniones internacionales que se celebraron en esta esfera cabe citar el Foro Iberoamericano y del Caribe sobre mejores prácticas y el Premio internacional de Dubai de 1998 a las mejores prácticas. Se debería elaborar en mayor medida el uso de las mejores prácticas para incluir más frecuentemente los mejores casos en los debates públicos con exámenes y documentación oportuna. Asimismo, se debería idear un arreglo viable entre las instituciones internacionales que preparan otras bases de datos.

 

13. Si bien todos los países están de acuerdo en que los indicadores son un instrumento útil para la vigilancia del desarrollo de los asentamientos humanos y la vivienda, uno de los problemas principales es la coordinación del gran número de actividades que se llevan a cabo en esta esfera en los niveles nacional, regional y mundial. Muchos países no han podido aprovechar en su totalidad los indicadores de Hábitat porque no cuentan con datos correspondientes debido a la falta de recursos y conocimientos especializados.

 

III. COOPERACIÓN INTERNACIONAL PARA EL FORTALECIMIENTO DE LA PARTICIPACIÓN DE LOS INTERESADOS DIRECTOS CLAVE EN LA EJECUCIÓN DEL PROGRAMA DE HÁBITAT

 

14. Hubo diez grupos distintos de asociados que se comprometieron a apoyar el Programa de Hábitat en Estambul: autoridades locales, organizaciones no gubernamentales y de base comunitaria, el sector privado, mujeres, la juventud, sindicatos, fundaciones, academias nacionales de ciencia e ingeniería, profesionales y parlamentarios. Hábitat, en estrecha colaboración con el resto del sistema de las Naciones Unidas y asociados de la sociedad civil, produjo una serie de guías para la ejecución del Programa de Hábitat dirigidas a grupos tales como los comités nacionales, las organizaciones de la sociedad civil, autoridades locales, el sector privado y los parlamentarios.

 

15. Muchos programas de desarrollo internacional que se ocupan de cuestiones de asentamientos humanos incluyen importantes componentes relacionados con la creación de relaciones de colaboración a nivel local y actividades de creación de capacidad diseñadas específicamente para los asociados locales, en especial las autoridades locales y las organizaciones no gubernamentales y de base comunitaria. Estos principios se incluyen en todos los programas mundiales e interregionales principales de Hábitat, así como en las actividades operacionales que se llevan a cabo con asociados en la financiación en diversos países en desarrollo. Hábitat ha puesto en práctica su función de catalizador y facilitador en la participación continua de los asociados en el proceso de ejecución del Programa de Hábitat mediante el apoyo a actividades complementarias concretas y la integración de nuevos asociados. A continuación figuran ejemplos en ese sentido.

 

16. La descentralización parece ser una de las tendencias más destacadas de la labor posterior a la Conferencia Hábitat II. Las autoridades locales han institucionalizado sus mecanismos consultivos en un órgano de coordinación llamado Asociación Mundial de Coordinación de Ciudades y Autoridades Locales (WACLAC). La WACLAC y Hábitat han firmado un memorando de entendimiento sobre indicadores urbanos, mejores prácticas y la preparación de una Carta Mundial de Gobierno Autónomo Local. Esta última iniciativa se comenzó en abril de 1998 bajo la dirección de la Unión Internacional de Autoridades Locales (IULA), con una propuesta de un proyecto de principios básicos y un marco institucional y jurídico para los sistemas de gobierno local. Este proyecto, que se está estudiando a través de amplias consultas entre las asociaciones de autoridades locales y con los gobiernos nacionales y otros grupos de asociados interesados, se presentará a la Comisión en su 171 período de sesiones para su examen. La IULA ha emprendido diversas iniciativas como parte de las actividades de su Grupo de Tareas sobre mujeres en el gobierno local y la Plataforma para la capacidad y el fortalecimiento de las instituciones. En el año 2000 se celebrará en Berlín (Alemania) el congreso mundial de ciudades "Urbanidad 21". La ciudad de Turín, en colaboración con Hábitat, organizó una conferencia internacional titulada "Nueva asociación para la adopción de medidas" que centró sus debates en los planes de acción nacionales basados en el concepto de relaciones de colaboración.

 

17. El Grupo Mundial de Parlamentarios para el Hábitat celebró una serie de reuniones regionales posteriores a la Conferencia Hábitat II, así como un foro mundial en Cancún (México), en 1998. En esas reuniones se comprometió a realizar esfuerzos para analizar la legislación nacional y las políticas públicas relacionadas con el desarrollo de los asentamientos humanos, poner de relieve las políticas eficaces y fomentar las reformas políticas y legislativas compatibles con el Programa de Hábitat.

 

18. Hábitat y una coalición de organizaciones de mujeres que se ocupan de cuestiones de la mujer y los asentamientos humanos firmaron un memorando de entendimiento y llegaron a un acuerdo en relación con una propuesta de trabajo trienal. La organización no gubernamental africana Grupo de Hábitat II (Africaucus) está realizando diversas actividades para obtener un amplio compromiso con la ejecución de los planes nacionales de acción de los países africanos, fortalecer la participación de las organizaciones de la sociedad civil en los procesos nacionales y locales posteriores a la Conferencia Hábitat II, crear una colaboración más amplia con las redes de investigadores africanos y fortalecer el establecimiento de redes y las actividades de promoción.

 

19. La Fundación Ford, a través de Hábitat, presta apoyo a actividades de investigación y consultas en África oriental relacionadas con la reducción de la pobreza y la gestión de los servicios municipales. La organización no gubernamental Foro de Investigadores sobre Asentamientos Humanos también ha realizado actividades en esta esfera, entre las cuales cabe citar una conferencia internacional celebrada en julio de 1998 en Ginebra, en la que se adoptó un programa mundial para la investigación orientada a la adopción de políticas en apoyo a la ejecución del Programa de Hábitat. La Federación Internacional de Topógrafos y Hábitat han firmado un memorando de entendimiento para establecer una relación de colaboración destinada a poner en práctica las recomendaciones relacionadas con la tierra y con la construcción que figuran en el Programa de Hábitat. El Instituto Internacional de Construcciones, una organización internacional dedicada a prestar asistencia a los obreros de la construcción, está movilizando recursos financieros para un proyecto destinado a cumplir varios objetivos del Programa de Hábitat, incluida la participación de los sindicatos en el proceso de seguimiento de la Conferencia Hábitat II.

 

20. La privatización de los servicios urbanos es una gran oportunidad para movilizar fondos para el desarrollo urbano y mejorar el acceso a los servicios básicos. Se deberían combinar en forma adecuada las estrategias de privatización con a) los programas ampliados para fortalecer las capacidades de las autoridades locales en la negociación de asociaciones y la gestión de contratos y b) los subsidios transparentes, en caso de ser necesarios, y asociaciones con el sector de la comunidad a fin de velar por un acceso económico para los pobres. Varios programas que han llevado a cabo Hábitat y sus asociados a nivel municipal incluyen ese tipo de estrategias integradas. El sector privado también desempeña una función clave en el suministro de viviendas, en especial en las zonas urbanas. En muchos países, los marcos jurídicos, financieros y de reglamentación todavía ponen impedimentos a la inversión de fondos privados en el sector de la vivienda. Estas son cuestiones que plantean en forma periódica los interesados directos locales en las consultas municipales, pero que, con frecuencia, no se pueden abordar con facilidad a nivel local. El sistema de las Naciones Unidas debería tener en cuenta más sistemáticamente estas cuestiones a nivel nacional.

 

21. La Conferencia Hábitat II representó un hito en el proceso de establecimiento de relaciones de colaboración para atender a las cuestiones de los asentamientos humanos. Ello fue el resultado de una gran fuerza impulsora internacional y del seguimiento de distintos asociados internacionales, incluida la secretaría de la Conferencia. A partir de entonces no se elaboraron estrategias sistemáticas para apoyar la evolución de este proceso, en especial en los países en desarrollo, si bien se han tomado algunas medidas interesantes, aunque de alcance limitado, que en su mayoría abordan los problemas planteados en los niveles mundial y regional. Además de prestar poco apoyo a los programas operacionales, las actividades de cooperación internacional para fomentar la aplicación de un enfoque de colaboración nacional y local orientado a atender las necesidades de los ciudadanos de las zonas urbanas de los países en desarrollo, en particular las de los pobres de las zonas urbanas, son muy limitadas. También en este caso se podrían realizar mejoras con el establecimiento o fortalecimiento de mecanismos de participación para la ejecución, evaluación y examen del Programa de Hábitat y de los planes nacionales de acción, así como medidas complementarias del Programa y de esos planes de acción, de conformidad con la resolución 51/177 de la Asamblea General. Debido a la falta de recursos, Hábitat no ha podido alentar, catalizar y vigilar ese proceso de la misma forma en que lo había hecho, con buenos resultados, durante la etapa de preparación de la Conferencia Hábitat II.

 

  IV. ACTIVIDADES REALIZADAS POR EL SISTEMA DE LAS
NACIONES UNIDAS Y OTRAS ORGANIZACIONES
DE DESARROLLO

 

22. Muchas organizaciones del sistema de las Naciones Unidas y varias instituciones financieras y organismos de cooperación contrajeron compromisos para ejecutar el Programa de Hábitat. Diversas actividades en esta esfera se señalaron a la atención de la secretaría.
 

Sistema de las Naciones Unidas

 
23. En su programa de Cooperación para el Desarrollo Urbano, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) se centra en la pobreza urbana, el medio ambiente urbano, la gestión pública urbana y la creación de capacidad de las administraciones municipales. El 5% de todos los proyectos del PNUD están relacionados con el desarrollo urbano y, concretamente, se ocupan de las particularidades del mundo urbano. El PNUD financia y vigila una serie de programas y proyectos ejecutados por Hábitat en los niveles mundial, regional, nacional y local. En 1997, unos 350 voluntarios de las Naciones Unidas prestaron apoyo a programas de asentamientos humanos destinados a la comunidad. Más de las dos terceras partes (el 68%) de los voluntarios de las Naciones Unidas son ciudadanos de países en desarrollo.

 

24. Los principales logros de la Comisión Económica para África (CEPA) son, entre otros, actividades que se ocupan de la cuestión de la deuda y el desarrollo del sector privado, el fomento de la sociedad civil, el adelanto de la mujer, las mejores prácticas y los indicadores sobre el desarrollo sostenible. Además del importante estudio mencionado en el párrafo 12, la CEPE ha elaborado actividades que se centran en cuestiones prioritarias para los países con economías en transición, incluida la privatización, la reforma de la vivienda, la administración de la tierra, la renovación urbana y el desarrollo de asentamientos humanos sostenibles. La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) ha trabajado activamente en el fortalecimiento de la capacidad de gestión de los gobiernos locales mediante el apoyo prestado a distintas reuniones de expertos y de alto nivel relacionadas con la vivienda y el desarrollo urbano. La CEPAL tiene planeado iniciar un proyecto regional sobre gestión urbana en las ciudades medianas.

 

25. El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) inició una Iniciativa de Ciudades Amigas de los Niños antes de la Conferencia de Estambul y en la actualidad se está centrando en la integración de las herramientas y documentos posteriores a la Conferencia Hábitat II a su labor habitual. Además de las actividades de cooperación en más de 160 países, el UNICEF ha preparado publicaciones y realizado investigaciones y cursos prácticos internacionales relacionados con la ejecución del Programa de Hábitat. Se están documentando los programas que reciben apoyo del UNICEF para hacer un intercambio más amplio de esta experiencia y aprovechar la amplia experiencia del Fondo en los últimos 30 años.

 

26. La Organización Mundial de la Salud (OMS) está llevando a cabo un Programa de Ciudades Saludables, que cuenta con la participación de más de 1.000 ciudades en todo el mundo. La OMS está elaborando planes de salud para las ciudades como un marco para el establecimiento de vínculos entre las condiciones de vida y la salud, que incluyen una gestión integrada ambiental y organizaciones de base comunitaria. La OMS está estableciendo relaciones de colaboración con distintos organismos de desarrollo multilaterales y bilaterales, incluido Hábitat. También está realizando amplias actividades de establecimiento de redes a nivel mundial, regional nacional y local.

 

27. A fin de fortalecer y consolidar las actividades de cooperación técnica, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) está elaborando un "Programa Mundial del Empleo Urbano: mejores empleos para la economía no estructurada". La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) está desarrollando varios proyectos de investigación relacionados con las medidas complementarias de la Conferencia Hábitat II, incluidos proyectos de creación de capacidad y de capacitación que tienen en cuenta las necesidades de las autoridades nacionales y locales. La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACDH) está realizando actividades en relación con la condición jurídica de los derechos a la vivienda, con miras a definir las obligaciones de los estados y de la comunidad internacional. La prevención de los desalojos forzados, la eliminación de la discriminación basada en el sexo en la vivienda y la elaboración de indicadores y puntos de referencia son prioridades máximas del Programa de la OACDH. Las prioridades de la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (ONUDI) relacionadas con los asentamientos humanos se centran en el tratamiento y la ordenación de los desechos, el desarrollo de energía eficiente y el tratamiento de las aguas, y los recursos de información sobre parámetros ambientales. La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) manifiesta su preocupación por el acceso a la tierra y el desarrollo equilibrado de los asentamientos en las zonas rurales. El Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de las Naciones Unidas lleva a cabo actividades de cooperación técnica en las esferas de agua dulce, energía y transporte y estrategias de desarrollo sostenible. El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) presenta información sobre las actividades de su Oficina Regional para Europa (ORPE) relacionadas con las tecnologías urbanas ambientalmente racionales y la ejecución local del Programa 21.

 

Instituciones financieras

28. El Banco Mundial ha realizado importantes actividades desde 1996 hasta la fecha en el sector urbano en cuatro esferas: primero, la prestación de servicios sostenibles para los pobres de las zonas urbanas, con el establecimiento del Grupo Temático de prestación de servicios para los pobres de las zonas urbanas, proyectos operacionales, cursos prácticos y conferencias, establecimiento de relaciones de colaboración e iniciativas, incluido un programa conjunto trienal con Hábitat para llevar los proyectos de mejoramiento urbano a un nivel nacional y elaborar estrategias de desarrollo urbano de las ciudades; segundo, la sostenibilidad ambiental urbana; tercero, la participación del sector privado en la financiación de los servicios urbanos; y cuarto, una estrategia urbana, desarrollada en 1998, en la que se hace hincapié en la necesidad de emplear en las economías urbanas y los gobiernos locales los mismos análisis, asesoramiento y estrategias que se emplean en las economías nacionales y en los gobiernos centrales. El Banco Mundial creó el Grupo de Asociaciones Urbanas en 1997 para colaborar con los actores del sector público y privado en la definición de los programas urbanos y la respuesta a los problemas críticos de las ciudades. La principal actividad del Grupo se centra en la creación de relaciones de colaboración internas y externas, incluida la iniciativa conjunta del Banco Mundial y Hábitat mencionada anteriormente, que vincula directamente los dos objetivos principales del Programa de Hábitat a la nueva estrategia urbana del Banco. Como parte del Programa de Asociaciones Urbanas se propondrá una serie de análisis multisectoriales de las ciudades, y también se invitó al Programa de Gestión Urbana ejecutado por Hábitat a estudiar la posibilidad de combinar su enfoque de consulta de las ciudades con el enfoque propuesto por el Banco Mundial en determinadas ciudades, especialmente, en una etapa inicial, en las ciudades africanas. Otra iniciativa importante del Banco Mundial es la campaña mundial para garantizar que 100 millones de las familias más pobres del mundo, y en especial las mujeres de esas familias, reciben créditos para el empleo independiente y otros servicios financieros y comerciales para el año 2005. Los programas de microcrédito todavía se llevan a cabo principalmente en las zonas rurales y se debería hace un esfuerzo para incorporar en mayor medida ese concepto a los programas urbanos. Otras iniciativas pertinentes del Banco Mundial son el desarrollo de fondos sociales, las redes de seguridad social y la descentralización.

 

Organismos de cooperación bilateral

29. Dinamarca se ha comprometido a asignar un 1% de su PNB a la cooperación para el desarrollo internacional y también un 0,5% para la asistencia ambiental y en casos de emergencia. El 60% de la asistencia bilateral para el desarrollo que presta Dinamarca está dirigido a los países africanos y un 20% como mínimo a los programas sociales básicos. Entre las prioridades de Dinamarca cabe citar la promoción del sector privado, las organizaciones no gubernamentales y las organizaciones de base comunitaria, la movilización de recursos nacionales y locales para los pobres y las tecnologías ambientalmente racionales.

 
30. Como resultado de las recientes evaluaciones y de su intención de atenerse al Programa de Hábitat, Francia reformó su política de ayuda para el desarrollo urbano y los arreglos institucionales para fomentar los vínculos de colaboración con los países receptores y promover la participación de distintos actores, incluidas las autoridades locales y las organizaciones no gubernamentales. Entre las prioridades de Francia cabe citar la reducción de la pobreza y los aspectos sociales del desarrollo, la promoción del sector privado, los servicios urbanos, las políticas de descentralización, la capacidad de gestión local, la creación de relaciones de asociación locales y la movilización de recursos internos. Francia también presta asistencia a determinados países del África subsahariana y del Caribe en la aplicación de las recomendaciones de la Conferencia Hábitat II a nivel local en las ciudades medianas.

 
31. Aproximadamente un 6% de la asistencia oficial para el desarrollo que presta Alemania en forma bilateral se asigna a las cuestiones relacionadas con los asentamientos humanos, en tres esferas principales: mitigación de la pobreza, protección de los recursos naturales y educación y capacitación. La asistencia oficial para el desarrollo que presta el Japón se centra principalmente en la preservación del medio urbano a través de los proyectos de tratamiento de desechos y saneamiento, la formulación de medidas para contrarrestar la contaminación del agua y del aire y las respuestas a los problemas del tráfico mediante cambios en las redes viales y ferroviarias. En el Reino Unido, el Departamento para el Desarrollo Internacional ha analizado sus actividades de cooperación para el desarrollo urbano en un informe titulado "Medidas prácticas para la ejecución del Programa de Hábitat en el siglo 21". El Reino Unido también contribuye al Programa de indicadores urbanos con la reunión de indicadores específicos locales, utilizando, entre otras cosas, métodos locales y basados en la comunidad. Según el estudio de la CEPE, varios países, incluidos Canadá, España, Finlandia y Suiza, ponen de relieve los esfuerzos que están realizando para hacer más visibles los intereses de los asentamientos humanos en sus prioridades de asistencia internacional para el desarrollo. Otros países hacen importantes contribuciones a la ejecución a nivel local y nacional del Programa de Hábitat en forma bilateral y a través de los programas de Hábitat, en particular Bélgica, Italia, los Países Bajos y Suecia.

 
32. Muchas organizaciones de desarrollo desean prestar asistencia directa a los gobiernos locales y asociados locales pero les resulta sumamente difícil hacerlo porque la cooperación y las relaciones internacionales deben canalizarse a través de los gobiernos nacionales. En muchos países donantes y receptores han elaborado procedimientos innovadores para canalizar la asistencia para el desarrollo directamente a través de organizaciones de la sociedad civil y gobiernos locales. Se debería alentar ese tipo de iniciativas, teniendo en cuenta las situaciones y características específicas de los países, así como la necesidad de fortalecer las capacidades institucionales para la coordinación de las políticas de desarrollo.

 
33. Las actividades de cooperación y coordinación entre las organizaciones de desarrollo bilaterales y multilaterales sobre cuestiones relacionadas con los asentamientos humanos se inician y desarrollan principalmente a nivel mundial y regional. A menudo esas iniciativas se basan en un proceso vertical, que comienza con los protocolos concluidos entre las sedes, y rara vez pasan a formar parte de las prácticas locales. A menos que esos arreglos de coordinación o cooperación sean impuestos u organizados por las ciudades y países receptores, los protocolos mundiales y regionales tienen muy poca influencia en las estrategias, criterios y programas locales y, en última instancia, apenas benefician a los pobres, que deberían ser el objetivo último de la cooperación internacional. Se deberían fortalecer las capacidades y recursos de las ciudades y países receptores para coordinar la asistencia internacional para el desarrollo en materia de asentamientos humanos. Se podría comenzar a aplicar un criterio de demostración coordinado sobre el terreno en determinados países en desarrollo y ciudades de esos países donde existe una gran voluntad política y ya se están realizando o están en proceso de negociación programas de asentamientos humanos sobre el terreno de distintos asociados. Para ello será necesaria una evaluación amplia de las características complementarias de los programas y capacidades de los organismos de cooperación, el fortalecimiento de los recursos y capacidades de los órganos de coordinación nacionales o locales y un fuerte apoyo de las sedes de los asociados que participan en esos programas.

 

V. PUNTOS QUE SE SOMETERÁN A EXAMEN

 
34. Después del impulso derivado de la Conferencia Hábitat II y de sus actividades preparatorias en 1995 y 1996, se movilizó una cantidad muy limitada de recursos para fomentar la cuestión de los asentamientos humanos y alentar y vigilar las iniciativas de cooperación internacional para la ejecución del Programa de Hábitat, con lo cual esa cuestión pasó a un segundo plano en el programa de la cooperación internacional. Muestra de esta regresión es la limitada cantidad de respuestas recibidas del cuestionario que se elaboró para ayudar a preparar el presente documento, en especial de los países en desarrollo. La CEPE tampoco ha recibido muchas respuestas de los Estados miembros del cuestionario mencionado. Como resultado de ello y a pesar de la gran influencia de las zonas urbanas en el desarrollo nacional y el rápido crecimiento de la pobreza urbana, no ha aumentado la cantidad de programas y proyectos relacionados con los asentamientos humanos, rara vez superan el 5% de la asistencia oficial para el desarrollo que se presta a los países en desarrollo y países con economías en transición. La llamada regla del 20/20 sigue siendo un objetivo que se logra muy pocas veces a nivel internacional, nacional y local. La Comisión tal vez desee estudiar la posibilidad de revitalizar el mandato de Hábitat para hacer un seguimiento de la evolución de la asistencia internacional dirigida al sector de los asentamientos humanos.

 

35. En particular, la Comisión tal vez desee recomendar a los gobiernos y organismos de desarrollo, incluidos los del sistema de las Naciones Unidas, que movilicen recursos adecuados para fomentar y alentar el establecimiento y el fortalecimiento, cuando proceda, de mecanismos de participación a nivel nacional y local para la ejecución, evaluación, examen, puesta en funcionamiento y seguimiento del Programa de Hábitat y los planes de acción nacionales. Se deberían complementar las directrices para la ejecución del Programa de Hábitat con actividades de promoción dinámicas. En la etapa preparatoria de la Conferencia se logró, con recursos limitados pero clave, dar impulso y alentar las iniciativas locales y nacionales. Esos mecanismos institucionales también contribuirán en gran medida a que el Programa de Hábitat pase a ocupar un lugar en los programas prioritarios de los gobiernos nacionales y locales y las organizaciones de la sociedad civil, con lo cual los entes de cooperación internacional tendrán presentes las cuestiones relativas a los asentamientos humanos y sus actividades en un nivel operacional se podrán coordinar.

 

36. En ese sentido, la Comisión tal vez desee hacer un llamamiento para una movilización amplia de los asociados en la prestación de apoyo a las campañas mundiales de seguridad de la tenencia y gestión pública urbana iniciadas por Hábitat. Esas campañas ayudarán a hacer de Hábitat el organismo mundial para las ciudades y consolidar la nueva dirección que está poniendo en sus actividades conforme a la visión estratégica en la que se tienen en cuenta la calidad de vida, el mejoramiento de las modalidades y estilo de la gestión pública urbana y la reducción de la pobreza urbana a nivel local.

 
37. En el mismo orden de cosas, la Comisión tal vez desee reafirmar el importante papel que cumple Hábitat en la ejecución de las actividades operacionales y recomendar la elaboración de enfoques coordinados sistemáticos para las actividades operacionales de los organismos internacionales en los niveles nacional y local, que se deberán poner a prueba en determinados países, incluida la evaluación de las características complementarias y capacidades, el fortalecimiento de las capacidades de coordinación y los compromisos estratégicos de las sedes. Esta tarea debería estar dirigida a elaborar enfoques integrados para la aplicación de las estrategias de reducción de la pobreza urbana en los niveles local y nacional.

 
38. Es sabido que de las reuniones regionales en que participaron distintos interesados directos sirvieron para aumentar el interés en las cuestiones relacionadas con los asentamientos humanos durante el proceso preparatorio de la Conferencia Hábitat II. La Comisión tal vez desee recomendar la celebración de una nueva serie de foros regionales y subregionales para intercambiar experiencias sobre los mecanismos de ejecución y los adelantos relacionados con el Programa de Hábitat a fin de aumentar la conciencia de los gobiernos nacionales y de todos los interesados directos, así como de examinar las estrategias de cooperación regional. En las regiones en desarrollo será necesario contar con la asistencia de la comunidad internacional para crear esos mecanismos consultivos regionales mediante la incorporación de la cuestión de los asentamientos humanos a los programas de los foros existentes o la ampliación de los foros especializados existentes, tales como las conferencias de ministros, para incluir a otros interesados directos. En ese sentido, la Comisión tal vez desee hacer un llamamiento para obtener apoyo internacional para el Programa Especial de Hábitat para África, que representa un enfoque regional integrado para la ejecución del Programa de Hábitat.

 
39. Todavía sigue siendo necesario aumentar la cooperación internacional en los asentamientos humanos, esfera que representa un porcentaje muy pequeño de la asistencia oficial para el desarrollo. Tras la adopción del Programa de Hábitat en junio de 1996 no se registró el aumento previsto en la asistencia internacional para el desarrollo urbano. La Comisión tal vez desee definir un programa para un debate amplio de la cuestión en el período extraordinario de sesiones que celebrará la Asamblea General en el año 2001 para realizar un examen y evaluación generales de la aplicación de los resultados de la Conferencia Hábitat II.